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lunes, 24 de junio de 2013

COMER DEMASIADO AZÚCAR "BLOQUEA" TUS CAPACIDADES


Tomar demasiado azúcar puede volverte  ”idiota”

Tomar demasiado azúcar puede echar a perder la capacidad intelectual de las personas, según un estudio estadounidense publicado el martes que muestra cómo una dieta rica en almíbar de maíz rico en fructosa mermó los recuerdos de las ratas de laboratorio.

Unos investigadores de la Universidad de California de Los Ángeles (UCLA) alimentaron a dos grupos de ratas con una solución líquida de almíbar de maíz rico en fructosa (un ingrediente común en las comidas procesadas) y agua corriente durante seis semanas.

A un grupo de ratas se le dió como suplemento, además, ácidos ricos en grasas omega 3, que estimulan el cerebro, en forma de ácido docosahexanoico (DHA) y aceite de linaza, y al otro grupo de ratas no.

Antes de que comenzase la dieta rica en bebidas azucaradas, las ratas habían sido sometidas a una sesión de entrenamiento de cinco días en un complejo laberinto. Y se les volvió a plantear el mismo desafío después de haber sido alimentadas con la solución azucarada para ver cómo les iba.

"Los animales que no recibieron DHA eran más lentos y sus cerebros mostraron un descenso en la actividad sináptica", afirma Fernando Gómez-Pinilla, profesor de neurocirugía de la Escuela de Medicina de UCLA. "Sus células cerebrales tenían problemas enviándose señales, lo que alteró la capacidad de las ratas para pensar claramente y recordar la ruta que habían aprendido seis semanas antes".

Una observación más profunda de los cerebros de las ratas reveló que aquellos que no recibieron los suplementos de DHA también dieron signos de desarrollar resistencia a la insulina, una hormona que controla el azúcar en la sangre y regula funciones cerebrales. "Debido a que la insulina puede penetrar la barrera sanguínea del cerebro, la hormona puede dar señales a las neuronas para provocar reacciones, que alteran el aprendizaje y pueden causar pérdida de la memoria", explicó Gómez-Pinilla.

En otras palabras, tomar demasiada fructosa podría interferir la capacidad de la insulina para regular cómo las células usan y acumulan azúcar, lo que es necesario para procesar los pensamientos y las emociones. "La insulina es importante en el cuerpo para el control del azúcar en sangre, pero puede adoptar un papel diferente en el cerebro, en el que la insulina parece interrumpir la memoria y el aprendizaje", afirmó. "Nuestro estudio muestra que las dietas ricas en fructosa dañan tanto el cerebro como el cuerpo. Esto es algo nuevo".

El almíbar de maíz rico en fructosa se encuentra de manera común en los refrescos, condimentos, comida para niños, salsa de manzana y otros aperitivos procesados.

El ciudadano estadounidense medio consume 18 kilogramos de almíbar de maíz rico en fructosa por año, según los datos del departamento de Agricultura de Estados Unidos.

"Nuestras conclusiones ilustran que lo que comes afecta cómo piensas", dice Gómez-Pinilla. "Seguir una dieta rica en fructosa a largo plazo altera la capacidad del cerebro para aprender y recordar información. Pero añadir ácidos ricos en omega 3 a tus comidas puede ayudar a minimizar el daño".

El estudio adaptado y resumido por Miguel Angel Pol y aparece publicado en The Journal of Physiology.

 

The Rush Studio

viernes, 21 de junio de 2013

LOS LÁCTEOS, SON BUENOS O MALOS?


LA LECHE Y SUS DERIVADOS PUEDEN TENER CONSECUENCIAS GRAVES PARA LA SALUD

 

En el día de hoy quiero presentar un artículo muy personal, controversial por donde lo puedan ver los lectores, no obstante, cada uno tiene sus creencias y experiencias alimenticias, y, en base a mi experiencia y vivencias con estos productos, puedo determinarme como alguien que está de acuerdo con la lógica de esta investigación.

 

Quiero aclarar que es una opinión personal, la cual aplico en mi estilo de vida y trabajo, y en base a los resultados obtenidos, que son en un 95% gratificantes y positivos, puedo atreverme a compartiros esto, sin ánimo de ofensa o detracción.

 

Así como yo estoy de acuerdo con esta investigación, seguro, habrá quien no lo esté y menos aun, la comparta, y eso es lo bonito de los debates abiertos.

 

Al final, aparece la persona que avala esta investigación y durante el texto, las Instituciones que han participado en el estudio.

 

LÁCTEOS, BUENOS O MALOS?

Siempre nos han dicho que tomar leche es indispensable para crecer y mantener saludables nuestros huesos y dientes. Me parece que la industria de los lácteos nos ha vendido ese mensaje por años.

Pero lo cierto es que el consumo de leche y sus derivados está relacionado con consecuencias graves a la salud, como cáncer, obesidad, osteoporosis, alergias y problemas digestivos, entre otros.

La información existe: estudios científicos de universidades de prestigio lo comprueban, sin embargo, ¿por qué no llega a nuestras manos? ¿quién va a atreverse a cuestionar a sectores como el de la industria de los lácteos?

Sin embargo es difícil aceptar este concepto y cambiar los hábitos de alimentación que hemos mantenido o nos han inculcado desde la infancia. Pero si observamos a los animales, nos será más fácil comprender por qué debemos eliminar estos productos de nuestra vida diaria. Ellos toman leche solo a edades tempranas, y de su propia especie. Y los humanos, tomamos leche durante la etapa adulta y además de otra especie: la vaca. Estamos actuando en contra de la naturaleza.

Pero, ¿qué hay de malo en la leche? Aquí enumero cuatro argumentos sobre por qué es mala para tu salud:

1.- Muchos somos intolerantes a la lactosa, sin saberlo…

 

De acuerdo al Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales de Estados Unidos (NIDDK, por sus siglas en inglés), de 30 a 50 millones de personas en su país son intolerantes a la lactosa: el azúcar presente en la leche y sus derivados. Datos de la facultad de Medicina de Harvard, indican que hasta el 70% de la población mundial es intolerante a la lactosa. La intolerancia entonces, no es una enfermedad, sino un estado fisiológico normal. Esto ocurre porque entre los dos y cuatro años de edad, nuestro cuerpo empieza a perder el poder de la enzima lactasa, que es la responsable de digerir la lactosa. Al seguir consumiendo leche, la lactosa que no se digiere permanece en el intestino, donde es fermentada por las bacterias del colon, lo que nos causa gases, dolor e inclusive diarrea.

2.- Nuestro cuerpo no puede absorber el calcio contenido en la leche

Cuando hablamos de leche, el primer nutrimento que nos viene a la mente es el calcio.

Pero precisamente una proteína de la leche, la caseína, es la que impide que podamos absorber el calcio que contiene. Esto ocurre porque al consumir proteínas animales, el pH de la sangre se vuelve ácido y el organismo, como reacción, saca parte del calcio que tenemos en los huesos para poder neutralizar esa acidez.

Un trabajo realizado por el doctor William Ellis, expresidente de la Academia Americana de Osteopatía Aplicada, demostró que las personas que toman entre 3 y 5 vasos de leche diarios presentan los niveles más bajos de calcio en la sangre. Lo que implica que el consumo en grandes cantidades de proteínas lácteas producen un exceso de acidez que el organismo intenta compensar mediante la liberación de minerales alcalinos.

Entonces, el hecho de vivir sin leche no es un impedimento para tener huesos y dientes fuertes, al contrario, estudios han demostrado que el consumo de lácteos o de alimentos con calcio no es un factor protector contra el riesgo de fracturas. La leche sí tiene nutrimentos indispensables, pero para obtenerlos no necesitamos tomarla. Los mejores alimentos para adquirir el calcio son los vegetales.

 

3.- Su consumo aumenta el riesgo de alergias y asma

La leche de vaca tiene tres veces más proteína que la leche humana. La caseína, una de sus proteínas, es una sustancia muy espesa que nuestro organismo no puede eliminar. En algunas personas se adhiere a los vasos linfáticos del intestino, impide la absorción de nutrimentos y ocasiona así problemas inmunológicos, alergias y asma.

4.- Puede causar cáncer

¿Cómo harán algunos productores de lácteos para que la vaca pueda producir leche en tan altas cantidades? Recurren a la hormona recombinante de crecimiento bovino (rBGH), la cual se inyecta a la vaca para que produzca más leche de la que podría dar de manera natural. Esto mismo incrementa los niveles de otra hormona denominada factor de crecimiento insulínico (IGF-1), que se traspasa a la leche y está relacionada con el cáncer de próstata, mama y ovarios, según datos del Instituto Nacional de Cáncer, publicados por la Universidad de Oxford. Los países que tienen menor índice de cáncer, como China, son los que no consumen lácteos.

Evitar el consumo de lácteos no es solamente una herramienta para bajar de peso, sino un aliciente para la salud. En un principio puede ser difícil acostumbrarte a vivir sin estos productos, pero las mejorías son notorias en la digestión, la piel, los niveles de colesterol y el rendimiento a lo largo del día.

La leche de almendra y de soya son buenas opciones para sustituir cualquier tipo de leche de vaca (entera, descremada, deslactosada y light). Prevendrás así el riesgo de padecer alguna enfermedad crónica y mejorarás tu calidad de vida.

 

Nota del Editor: Las opiniones recogidas en este texto pertenecen exclusivamente a Raquel Pérez de León,  Licenciada en Nutrición, especializada en clínica y deporte.

Adaptado a un lenguaje entendible sin alterar la idea básica por:


Miguel Ángel Pol Vaquer
The Rush Studio

lunes, 17 de junio de 2013

¿CUÁNTO TIEMPO DEBO CORRER PARA QUEMAR GRASA?


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¿Existe una cantidad de minutos ideales para quemar grasa?


Hace unos años existía una teoría que decía que se debía de realizar un mínimo de 20 minutos de cardio continuo para por lo menos consumir el glucógeno de los depositos y empezar a usar las grasas acumuladas como energía, ya que se pensaba que hasta que no se agotase parte del glucógeno no se empezaba a usar la grasa.

Pero ya ha quedado demostrado que esa teoría está obsoleta ya que la universidad de Cornell (Nueva York) hizo un estudio con dos grupos de personas de similares condiciones físicas. Un grupo corría 4 veces a la semana 40 minutos seguidos y el otro grupo dos series de 20 minutos una a media mañana y otra a la media tarde, y la cantidad consumida de media por ambos grupos era la misma.

Así que con esto queda claro que todo el tiempo que se realice cardio a ritmo moderado se consumirá grasa, así que da igual como lo dividas pero al final puedes contar como tiempo total diario para el consumo de grasa el que realices en todos las sesiones del día.

Pero si lo que te preocupa es no cataboliza demasiado músculo ya que tú objetivo es definirte, quitando grasa pero sin perjudicar a tu músculo, lo ideal es que el tiempo empleado no supere los 40 minutos seguidos, ya que seguramente tus depósitos de glucógeno descenderán lo suficiente como para empezar a usar los aminoácidos musculares.

Los picos de intensidad


Desde un principio hemos hablado de que la mejor forma de realizar el cardio para quemar más grasa es realizarlo a un ritmo moderado entre 70 y 80% de nuestras pulsaciones máximas, pero existe una particularidad para romper esa barrera cardiaca con el fin de movilizar las grasas hasta el músculo para ser consumidas como energía: meter picos de intensidad en la carrera.

Los picos de intensidad no son otra cosa que realizar un minuto cada cierto tiempo de carrera más explosiva elevando el pulso a un 85% o 90% de nuestro máximo. Por una parte en ese momento se usa mucho más glucógeno y al músculo le daría tiempo de recargarse con “gotitas” de grasa para ser usada luego como combustible, pero lo más importante es que el ejericio de alta intensidad mantiene nuestro metabolismo elevado después de realizar el cardio.

En la próxima entrada os explicaremos una rutina sencilla de combinación de cardios y de picos de intensidad para que intentéis promover la quema de grasa al máximo.

 

jueves, 6 de junio de 2013

EL DESAYUNO: La comida MÁS IMPORTANTE del día



El gran olvidado


 

 
 
 
Uno de los principales problemas de nuestra alimentación radica en la incorrecta distribución de las comidas a lo largo del día, reparto condicionado en gran medida por el trepidante ritmo de vida de las sociedades desarrolladas. A pesar de que el desayuno es una de las comidas más importantes del día, diversas encuestas alimentarias muestran que en la primera ración de la mañana realizamos una ingesta nutritiva o calórica deficiente. El desayuno ha sido tradicionalmente en nuestro país una comida ligera.

Hace décadas en las zonas rurales realizaban un desayuno poco abundante antes de comenzar las tareas del campo, pero el almuerzo completaba entonces la necesidad del organismo de nutrientes y no faltaban en la pausa a media mañana embutidos, queso, huevos, pan, vino y/o aguardiente. Hoy, sin embargo, muchas personas consideran que han desayunado tras haber tomado únicamente café, zumo o galletas lo que dista de las recomendaciones de dieta equilibrada. Además, el almuerzo brilla por su ausencia para muchos debido a los rígidos horarios laborales, por lo que el desayuno, ese gran olvidado, se convierte en aliado para afrontar el día con el depósito lleno de glucosa, nuestro combustible energético.

Fundamental para niños en edad escolar

Un desayuno equilibrado contribuye a un reparto más armónico de las calorías a lo largo del día y proporciona, además, una ración de seguridad de muchos nutrientes especialmente importantes en el periodo escolar, época de gran crecimiento y desarrollo. Y a pesar de que uno de cada dos adultos reconoce los beneficios de un buen desayuno para comenzar adecuadamente el día, en Europa siete millones de niños acuden al colegio cada mañana sin desayunar, según el barómetro Europeo Kellogg's del desayuno (1996-2008). Este estudio también pone de manifiesto que la alimentación que efectúan gran parte de los niños y adolescentes a primera hora de la mañana contiene un aporte calórico inferior a lo recomendado. Esto, o su propia omisión, genera un desequilibrio de sus hábitos alimentarios y, en consecuencia, de su estado nutricional.

¿Qué ocurre si no desayunamos?

Algunas de las consecuencias de saltarse el desayuno son decaimiento, falta de concentración y mal humor, debido al déficit de glucosa -nuestro principal combustible energético- que produce el ayuno. Hay que recordar que a primera hora de la mañana el organismo lleva ya entre 8 y 10 horas sin recibir ningún alimento. La falta de glucosa empuja a nuestro cuerpo a quemar otras reservas energéticas, lo que causa múltiples alteraciones en el normal funcionamiento orgánico. En edades escolares, esto condiciona el aprendizaje y acarrea un descenso del rendimiento, ya que la capacidad de locución o expresión, de memoria, de creatividad y de resolución de problemas quedan particularmente afectadas. Estas observaciones han sido verificadas tanto en niños que presentaban una alimentación equilibrada en su conjunto como en niños que presentaban una alimentación insuficiente. Por todo ello, se puede considerar que el desayuno es un hábito alimentario que llega a condicionar el estado físico, psíquico y nutricional, pero no sólo de los niños y adolescentes, sino en personas de todas las edades.

Beneficios de un buen desayuno

Diversos estudios demuestran los beneficios para la salud relacionados directamente con la toma de un desayuno equilibrado:

·  Mejora del estado nutricional (grado en el que nuestras necesidades de energía y nutrientes quedan cubiertas mediante los alimentos que consumimos). Tomar un buen desayuno ayuda a realizar ingestas más altas de la mayor parte de los nutrientes que el organismo precisa. Las personas que no desayunan suelen seguir una dieta de peor calidad, mientras que quienes lo hacen, suelen hacer una dieta menos grasa y más rica en fibra, vitaminas y minerales.

* Grasa. Si el desayuno incluye: tostadas, pan, cereales de desayuno, galletas sencillas, etc., el consumo diario de grasa es menor. El consumo de estos alimentos contribuye a aumentar los aportes calóricos realizados a partir de los hidratos de carbono, reemplazando otros con mayor contenido graso (bollería industrial, repostería, etc.).
* Fibra. Si se incluyen cereales de desayuno o panes integrales, las posibilidades de satisfacer las necesidades de fibra son mayores.
* Vitaminas y minerales. El desayuno contribuye significativamente a los aportes diarios de vitaminas y minerales. Estudios realizados en población infantil en distintos países han evidenciado aportes significativamente inferiores para ciertos minerales (hierro, calcio, magnesio y cinc) y vitaminas (tiamina y piridoxina) en los que no desayunaban en comparación con los que consumían esta ración.

·  Control del peso. Las personas que desayunan mantienen el peso dentro de límites saludables en mayor medida que las que omiten esta ración. El hecho de repartir las calorías durante el día en 4 ó 5 comidas, ayuda a que no se sobrecargue ninguna de ellas. Esto también contribuye a evitar picar entre horas (snacks, golosinas, bollería y otros dulces, refrescos, etc.), factor muy importante a la hora de controlar el peso.

·  Rendimiento físico e intelectual. Las personas que omiten el desayuno ponen en marcha una serie de mecanismos en el organismo (descenso de la hormona insulina y aumento de cortisol y catecolaminas&) para mantener la glucemia (nivel de azúcar en sangre) en valores aceptables. Estos cambios hormonales alteran o condicionan la conducta e influyen negativamente en el rendimiento físico e intelectual.

¿Cómo es un desayuno equilibrado?

El desayuno debe suponer entre el 20 y el 25% de las calorías ingeridas a lo largo del día. Para que sea equilibrado, deben estar representados como mínimo los siguientes grupos de alimentos: lácteos (leche, yogur, cuajada, requesón.), frutas y cereales (pan, tostadas, cereales de desayuno, galletas). Aparte de estos, también pueden participar otros alimentos, como derivados cárnicos y dulces, en cantidades moderadas.

·  Cereales. Proporcionan hidratos de carbono que aportan energía, vitaminas y minerales. Los cereales integrales aportan, además, fibra.

·  Lácteos. Contienen proteínas de calidad, calcio, vitaminas A y D, y vitaminas del grupo B (principalmente riboflavina o B2).

·  Frutas. Aportan hidratos de carbono, agua, vitaminas, minerales y fibra.

·  Derivados cárnicos. Jamón cocido o serrano, fiambres poco grasos (de pollo o pavo), embutidos Contienen proteínas de calidad con función formadora (de construcción de tejidos y células) y cantidades variables de grasa con función energética.
·  Otros. Azúcar, mermelada, miel, etc. Aportan hidratos de carbono con función energética

miércoles, 5 de junio de 2013

MITO Y VERDAD SOBRE LAS BEBIDAS DEPORTIVAS O ISOTÓNICAS EN EL ENTRENAMIENTO.



 

MITO: Todas las bebidas deportivas son iguales y no hay diferencia entre ellas en el rendimiento del entrenamiento.

 

VERDAD: No todas las bebidas deportivas son creadas de la misma manera ya que una bebida deportiva bien formulada debe rehidratar, reponer y reactivar el cuerpo en una forma rápida.

 

Rehidratar: La mayoría de bebidas tienen un sabor que mantienen al atleta tomando a gusto. Además, la solución aporta carbohidratos de rápida absorción en al menos 6% que ayuda a acelerar la recuperación de fluidos en el cuerpo.

 

Reponer: Los electrolitos como el sodio, el potasio y el cloro son perdidos a través del sudor en el ejercicio. Estas bebidas isotónicas ayudan a reponerlos evitando por ejemplo la llegada de calambres entre otros efectos.

 

Reactivar: A diferencia del agua, dichas bebidas tienen la cantidad justa de carbohidratos para dar la energía que los músculos necesitan para combatir la fatiga. Al eliminarse esa fatiga, el deportista adquiere una ventaja fundamental.

 

Bajo qué condiciones es recomendable beberlas? Hay muchas opiniones sobre ello, no obstante, la respuesta más recomendada es tomarla en aquellos ambientes en donde se suda en exceso, por ejemplo, es más recomendable tomarla para aquella persona que sale a correr a la calle en pleno verano que la persona que corre en una cinta en el aire acondicionado. Los tipos de sudor de cada uno de ellos es totalmente diferente debido al entorno, por tanto, también la necesidad de este tipo de bebidas es diferente.

lunes, 3 de junio de 2013

Mitos de entrenamiento

Seguir consejos o ideas erróneas puede menoscabar los esfuerzos que se hagan para tener un estilo de vida saludable, y en muchas ocasiones, puede llegar a ser frustrante cada intento que se inicie....

MITO 1: Entrenar los abdominales elimina la grasa acumulada en la cintura

VERDAD: Los ejercicios abdominales son excelentes para mejorar la postura y fortalecer los músculos, mejorando la forma de la zona abdominal, pero en sí tienen poco efecto en la eliminación de la grasa que cubre los músculos abdominales.

Para lograr la eliminación de la grasa es necesario consumir menos calorías de las que se queman, o quemar más calorías de las que se consumen, y esto se logra con un buen plan de entrenamiento que involucre todo el cuerpo.

MITO 2: Sólo los ejercicios aeróbicos ayudan a bajar de peso porque aceleran el metabolismo

VERDAD: El metabolismo (velocidad con la cual se queman las calorías) aumenta durante y después de una sesión de ejercicios. Aunque se queman calorías durante el ejercicio aeróbico, incluir en la rutina de ejercicios un entrenamiento de fuerza, ayudará a quemar más calorías y a fortalecer los músculos, intensificando los efectos positivos de la aceleración del metabolismo.

MITO 3: Sin dolor, no se obtienen resultados

VERDAD: El ejercicio no debe producir dolor. El sentir los músculos adoloridos, no es lo mismo que sentir dolor. No tiene que sentir la sensación de «ardor» en los músculos para saber que el ejercicio está funcionando favorablemente.

MITO 4: Entre más ejercicio aeróbico haga, mejor serán los resultados

VERDAD: No es necesario esforzarse al extremo para obtener los beneficios del ejercicio físico. Un buen programa de acondicionamiento físico debe incluir estiramientos y entrenamiento de fuerza; así como también, ejercicios aeróbicos. Días de ejercicios muy intensos, deben alternarse con días menos intensos.

MITO 5: El ejercicio efectivo tiene que ser agotador

VERDAD: Todo tipo de actividad física es bueno. No piense en "ejercicio” como tal, piense mejor en que se trata de una “actividad física”. El baile, la jardinería y las caminatas al aire libre, son actividades saludables. Aunque parezca que lo que sabemos sobre acondicionamiento físico cambie constantemente, ciertas realidades prevalecen. La actividad física es necesaria para mantenerse en buen estado de salud. Estar en buena forma, nunca le causará daño.

MITO 6: Es necesario bajar de peso antes de comenzar a entrenar con pesas porque si no la grasa se endurece

VERDAD: Precisamente todo lo contrario. El ejercicio con pesas hace aumentar la masa muscular, y al aumentar la masa muscular el metabolismo basal (el metabolismo en estado de reposo) aumenta, lo que ayuda a la eliminación de la grasa.

Sólo en los casos de obesidad mórbida, o en los casos de lesiones debidas al sobrepeso, es necesario primero bajar de peso antes de comenzar a entrenar con pesas.

MITO 7: Si no me duelen los músculos hoy significa que no hice un buen entrenamiento ayer

VERDAD: El dolor muscular que se suele sentir los dos días siguientes a un entrenamiento, se debe a la acumulación de ácido láctico en el tejido muscular. Si se hacen los estiramientos adecuados, y actividades físicas de enfriamiento (como un cardio muy suave) después de entrenar y antes de entrenar con pesas, este dolor muscular producido por el ácido láctico se puede aminorar. Una vez que se alcanza un buen nivel de resistencia física, este tipo de dolor muscular tiende a desaparecer, pero eso no es una señal de que el entrenamiento no ha sido bueno. Lo que hay que tomar en cuenta en la efectividad del entrenamiento es cómo nos sentimos físicamente, en los niveles de energía, en la resistencia cardiovascular y en el rendimiento en general.

MITO 8: Las mujeres sólo deben hacer ejercicios aeróbicos, porque el entrenamiento con pesas las pone “musculosas” como los hombres

VERDAD: La masa muscular que puede desarrollar un hombre jamás va a poder ser desarrollada por una mujer, ya que las mujeres naturalmente no tienen los altos niveles de testosterona que tienen los hombres. Además, también hay que considerar que la distribución de la masa muscular es muy diferente entre hombres y mujeres, especialmente en la parte superior del cuerpo, en donde las mujeres tienen bastante menos masa muscular que los hombres. De esta forma, una mujer por mucho que entrene con pesas, jamás lucirá físicamente como un hombre.

En las mujeres, el ejercicio con pesas es muy beneficioso para tonificar (afirmar) la masa muscular y definir la forma natural del cuerpo femenino.

MITO 9: Si no hay sudor, el ejercicio cardiovascular no sirve

VERDAD: El sudor se produce porque a una determinada temperatura ambiente el cuerpo necesita enfriarse. Por ejemplo, si al hacer una cierta actividad física, con 30ºC mi cuerpo suda, yo no voy a sudar si hago esa misma actividad física en un ambiente a 15ºC, y sin embargo mi metabolismo sí se ha elevado de igual forma, pero como está más frío el ambiente, el cuerpo no necesita sudar para ayudar a enfriarse. Lo que sí hace el sudor es ayudar a eliminar el líquido subcutáneo (el líquido que se acumula entre la piel y el músculo), pero no a eliminar la grasa.

MITO 10: El entrenamiento con pesas “acorta los músculos”, deteriorando la flexibilidad del cuerpo

VERDAD: Al contrario, el entrenamiento con pesas mejora la flexibilidad, siempre que se tenga cuidado de hacer el rango de movimiento completo en cada ejercicio, y entrenando los músculos antagonistas dentro de la misma sesión de ejercicios (por ejemplo, si entreno bíceps, entreno también los tríceps). Y nunca olvidar de hacer elongaciones o estiramientos durante y/o al terminar el entrenamiento.

Así que, si se hace correctamente, el entrenamiento con pesas ayuda a evitar lesiones musculares y articulares porque el músculo, además de estar más fortalecido, está más flexible, evitando transferir un esfuerzo mayor a las articulaciones ante determinados esfuerzos.

MITO 11: Si dejo de entrenar, lo que yo haya ganado de masa muscular se transformará en grasa

VERDAD: El entrenamiento o ejercicio incrementa la actividad física, por lo que se necesita de mayor de energía, la cual es provista por lo que se come o ingiere diariamente. Si se deja de hacer actividad física, y se sigue comiendo la misma cantidad de calorías, obviamente van a quedar calorías sin quemar, las cuales se convertirán en grasa.

 

En todos los casos, SIEMPRE, asesórate por un profesional.
 
Normalmente hacer ejercicio solo nunca es tan efectivo como cuando tienes a alguien que te sigue y te motiva a optimizar tu tiempo para la actividad física.
 
No es lo mismo ir al Gimnasio que ENTRENAR.
 
 Trata siempre de optimizar tus tiempo para la actividad física, ya que una hora de entrenamiento a un ritmo constante siempre ayuda a acelerar todos los procesos tanto de tonificación como de quema de grasas.
 
THE RUSH Personal Training STUDIO